¿Tu personalidad te pone en riesgo de ciberdelito?
Las compras impulsivas en línea, la descarga de música y el uso compulsivo del correo electrónico son signos de un cierto rasgo de personalidad (Tu personalidad te pone en riesgo de ciberdelito) el cual lo convierte en un objetivo para los ataques de malware. Una nueva investigación de la Universidad del Estado de Michigan examina los comportamientos, tanto obvios como sutiles, que llevan a alguien a ser víctima de un delito informático relacionado con troyanos, virus y malware.
“Las personas que muestran signos de bajo autocontrol son las que encontramos más susceptibles a los ataques de malware”, dijo Tomas Holt, profesor de justicia penal y autor principal de la investigación. “Las características de un individuo son fundamentales para estudiar cómo persevera el crimen cibernético, en particular la impulsividad de la persona y las actividades realizadas mientras están en línea tienen el mayor impacto en su riesgo”.
El autocontrol bajo, explicó Holt, viene en muchas formas. Este tipo de persona muestra signos de falta de visión, negligencia, comportamiento físico versus verbal y una incapacidad para retrasar la gratificación.
“El autocontrol es una idea que se ha considerado en gran medida en criminología en términos de su conexión con la comisión de delitos”, dijo Holt. “Pero encontramos una correlación entre el autocontrol bajo y la victimización; las personas con este rasgo se ponen en situaciones donde están cerca de otras personas que están motivadas para violar la ley “.
La investigación, publicada en Social Science Computer Review, evaluó en una encuesta, el autocontrol de casi 6,000 participantes, así como el comportamiento de sus computadoras las cuales podría indicar malware e infección. Para medir la victimización, Holt y su equipo hicieron a los participantes una serie de preguntas sobre cómo podrían reaccionar en ciertas situaciones y para el comportamiento de la computadora, preguntaron si esta tenía un procesamiento más lento, fallas, ventanas emergentes inesperadas y el cambio de la página de inicio en su navegador web.
“Internet tiene riesgos omnipresentes”, dijo Holt. “En un espacio en línea, hay una oportunidad constante para que las personas con bajo autocontrol obtengan lo que quieren, ya sea películas pirateadas u ofertas de bienes de consumo”.
Como lo explicó Holt, los hackers cibernéticos y los ciberdelincuentes saben que las personas con bajo autocontrol buscarán en Internet lo que quieren, o piensan que quieren, así es como saben los sitios, archivos o métodos a atacar.
La comprensión del lado psicológico del autocontrol y los tipos de personas cuyas computadoras se infectan con malware, y las cuales probablemente lo transmiten a otros, es fundamental para combatir la ciberdelincuencia, dijo Holt. Lo que la gente hace en línea es importante, y los factores de comportamiento en juego están completamente relacionados con los riesgos.
Los científicos informáticos, dijo Holt, abordan la prevención y educación del malware desde un punto de vista técnico; buscan nuevas soluciones de software para bloquear infecciones o mensajes sobre las infecciones en sí mismas. Esto es importante, pero también es esencial abordar el lado psicológico de los mensajes para aquellos con bajo autocontrol y conductas impulsivas.
“Hay aspectos humanos del ciberdelito que no tocamos porque nos enfocamos en el aspecto técnico para solucionarlo”, dijo. “Pero si podemos entender el lado humano, podríamos encontrar soluciones más efectivas para la política y la intervención”.
De cara al futuro, Holt espera ayudar a romper los silos entre las computadoras y las ciencias sociales para pensar de manera integral sobre la lucha contra los delitos informáticos.
“Si podemos identificar los factores de riesgo, podemos trabajar en conjunto con los campos técnicos para desarrollar estrategias que luego reduzcan los factores de riesgo de infección”, dijo Holt. “Es un problema pernicioso al que nos enfrentamos, por lo que, si podemos atacar desde ambos frentes, podemos identificar los factores de riesgo y las estrategias técnicas para encontrar soluciones que mejoren la protección para todos”.
Fuente: EC-Council